Las entregas de gas ruso a través del gasoducto Nord Stream se suspendieron el miércoles durante tres días.Según Moscú, el gasoducto que une los campos siberianos directamente con el norte de Alemania está oficialmente en mantenimiento.Sin embargo, esta nueva parada de suministro aumenta aún más la desconfianza entre los rusos y Occidente.Los analistas hablan de una nueva ronda en la lucha libre por el poder.Desde la mañana de este miércoles (31), Rusia ha vuelto a interrumpir el suministro de gas natural a Europa, que normalmente se realiza a través del gasoducto Nord Stream 1.El oleoducto fue cerrado oficialmente hasta el sábado por "trabajos de mantenimiento".Gazprom asegura que esta operación debe realizarse "cada 1.000 horas".Pero el argumento no convenció a Berlín.El máximo responsable de la agencia energética alemana considera esta operación "técnicamente incomprensible"."Rusia toma una decisión política después de cada interrupción de mantenimiento como esta", agregó.El 14 de julio, con motivo de la celebración nacional francesa, el presidente Emmanuel Macron llegó a utilizar la expresión “arma de guerra”, al calificar el pacto energético ruso con el continente europeo.La incertidumbre es aún mayor en Lubmin, el puerto del mar Báltico donde finaliza el oleoducto, porque esta vez, a diferencia de julio, la operación no estaba prevista con antelación.Sin embargo, el portavoz del gobierno ruso, Dmitry Peskov, dice que las sanciones contra Moscú "no permiten que se realicen los trabajos normales de mantenimiento y reparación", y en julio, después de que se realizó el mantenimiento, la válvula solo se reabrió con un limitado: 20% de Capacidad normal de Nord Stream.Sin embargo, las autoridades alemanas están un poco más relajadas sobre el suministro de energía este invierno.El objetivo de almacenamiento fijado por Berlín para octubre debería alcanzarse a principios de septiembre.En cuanto al gas, Francia ha sufrido un drenaje gradual de los flujos de Rusia y se espera que el gigante ruso Gazprom interrumpa las entregas al grupo francés Engie a partir del jueves.Los funcionarios y los industriales creen que Francia, que ha diversificado sus suministros y está en camino de llenar sus instalaciones de almacenamiento, tendrá suficiente gas para pasar un invierno normal en términos de calefacción.Sin embargo, puede haber escasez en caso de un resfriado más fuerte.En cuanto a la electricidad, el país carece de un buen número de reactores nucleares, habiendo hoy doce (de 56) apagados por problemas de corrosión, y EDF, la agencia eléctrica francesa, tendrá que reiniciar lo suficiente para el período frío.Además, las existencias hidráulicas son bajas en Francia, que tendrá que depender de las importaciones de sus vecinos, pero aquí también persisten las incertidumbres.ID: {{comentarios.info.id}} URL: {{comentarios.info.url}}Por favor, inténtelo de nuevo más tarde.No es posible publicar nuevos comentarios.Solo los suscriptores pueden leer y comentar.¿Aún no eres suscriptor?Suscríbase ahora.Si ya es suscriptor de UOL, inicie sesión.El autor del mensaje, no UOL, es responsable del comentario.Lea los términos de uso